30 08 2021

Probablemente todos hayamos oído hablar del dinero virtual, que puede o no estar respaldado por monedas físicas. ¿De qué se trata exactamente, y puedes realmente hacerte multimillonario construyendo una granja de excavadoras? Aunque suene aterrador, todo lo que necesitas para construir tu primera excavadora y unirte a este misterioso grupo de mineros es un poco de conocimiento del tema y un ordenador potente.

¿Qué son las criptodivisas?

Una criptodivisa o moneda virtual es un sistema distribuido conectado por nodos, comúnmente llamado monedero. En ella se almacena información sobre las unidades contractuales que se poseen, a la que sólo puede acceder alguien que conozca la clave privada. No es posible que la misma persona vuelva a emitir la misma unidad.

Cualquier persona, en cualquier parte del mundo y en cualquier momento, puede crear su propia criptodivisa. La mayor parte del código fuente de la moneda virtual se basa en software libre, que los creadores alteran ligeramente para sus propios fines, modificando los parámetros de su moneda. Es decir, en pocas palabras, se crea un código de unidad y su valor depende de la fuerza y la estabilidad del equipo de excavación.

Las criptodivisas más populares son: Bitcoin, Ethereum, Ripple, o la muy memeable Dogecoin, de cuya popularidad y altibajos en bolsa es responsable Elon Musk.   

Las criptodivisas atraen la atención del público no sólo por la forma teóricamente sencilla de "minarlas", sino sobre todo por el entorno imprevisible que se reúne en torno a las monedas virtuales. Se trata, por tanto, de una especie de juego, igual que jugar en la bolsa real.

¿Qué son los mineros de criptomonedas? 

En la época de nuestros bisabuelos, cavar significaba que un minero bajaba a una mina y, golpeando la pared con un pico, extraía de ella un mineral más o menos precioso. Así es exactamente como funciona la minería de criptomonedas, sólo que en lugar de la fuerza de los músculos, los mineros utilizan la potencia de su ordenador.  

Minar una moneda virtual es producir una nueva moneda que, una vez que sale al mercado, en cada transacción debe confirmarse con el minero que la ha excavado. Para ello se utilizan las cadenas de bloques, que pueden considerarse un tipo de libro de contabilidad.

Al principio del desarrollo del mercado de criptomonedas, la forma más popular de producir criptomonedas era utilizando los recursos digitales del procesador. Sin embargo, se trata de un proceso lento y que conlleva poco rendimiento en comparación con el trabajo realizado por el equipo. Además, los ordenadores de minería necesitan ser refrigerados intensamente, lo que aumenta los costes de electricidad.  

Si, por el contrario, un minero valora más la velocidad de excavación o la eficiencia, preferirá utilizar máquinas ASIC, circuitos integrados específicos. Diseñados para criptomonedas específicas, sólo se utilizarán para producir nuevas unidades. Sin embargo, debido a la acumulación de energía en una única ubicación digital, esta forma de excavar puede anular un elemento fundamental de las criptodivisas: la descentralización.

El método más famoso de minería es sin duda el de las tarjetas gráficas, que deben sus vertiginosos precios recientes a la minería. El uso de varias tarjetas gráficas aumenta la eficiencia de la minería. Normalmente, los mineros que utilizan esta solución apuestan por carcasas abiertas que permiten insertar fácilmente más componentes en el ordenador. Sin embargo, debido al aumento de los precios de las GPU, el inicio de la inversión puede ser mucho más elevado que la minería en la CPU.

Un juego costoso de El lobo de Wall Street

El problema más importante que surge al entrar en el mundo de la minería de criptomonedas es el coste de la electricidad. Estas granjas utilizan enormes cantidades de energía, principalmente debido a los amplios sistemas de refrigeración que protegen los equipos. Aparte de esto, se necesita un software de excavación que debe configurarse en función de los requisitos de la moneda virtual.

Sin embargo, para que estas inversiones se rentabilicen en monedas tangibles utilizadas en el mundo físico, a la hora de elegir el camino del minero, hay que elegir el tipo de unidades que se van a minar en consecuencia.   

Un criterio importante es el precio del activo, y debido a las grandes fluctuaciones del mercado de valores, es aconsejable elegir una moneda cuya minería sea inferior al precio actual del mercado. Sin embargo, esto no cambia el hecho de que la minería se asocia con el riesgo de perder dinero. Una vez minada, la moneda también puede almacenarse en previsión de días mejores: al fin y al cabo, basta un tuit para que las acciones suban miles de millones.  

No en todos los países es legal poseer y minar criptodivisas. Además, no en todos los países el precio de la electricidad soporta el desarrollo de este segmento del mercado digital.

Requisitos de hardware del minero

Para construir tu propia mina pequeña, que no pondrá en peligro una ciudad, necesitas una placa base, una memoria RAM, un procesador y una fuente de alimentación. Además, necesitas una GPU y un sistema de refrigeración muy eficiente. Todo esto debe colocarse en un marco especial o en una caja.   

Es importante utilizar equipos de alta calidad — la fuente de alimentación debe ser lo suficientemente duradera, ya que la máquina de minería trabaja 24/7, y un fallo puede ser devastador para los recursos de nuestra cartera. El sistema de refrigeración basado en ventiladores y los equipos de minería deben ser seleccionados de manera que la refrigeración de los componentes sea lo más eficaz posible para utilizar plenamente la capacidad del minero.