05 08 2022

Los coches eléctricos son cada vez más populares en todo el mundo. La mayoría de los países están dispuestos a apoyar el desarrollo de este sector automovilístico y conocidas marcas de automóviles están ampliando su gama para incluir coches con muy bajas emisiones. Descubre más sobre los coches eléctricos, su historia y si deberías invertir en tu propio coche eléctrico y por qué.

Coches eléctricos: el pasado electrizante de la automoción

Mucha gente piensa que el automóvil eléctrico es un invento del siglo XXI. Sin embargo, su historia comienza mucho antes, ya en 1837. Fue entonces, en Escocia, en la localidad de Averdeen, cuando se construyó el primer coche eléctrico. Este tipo de coche gozó de gran popularidad entre los usuarios y, por ello, a finales del siglo XIX, los primeros taxis eléctricos de batería llegaron a las calles de Londres y Nueva York. Sin embargo, los bajos precios del petróleo hicieron que los coches eléctricos desaparecieran rápidamente de las carreteras y fueran sustituidos por coches de combustión.

Al recordar la historia del origen y el desarrollo de los coches eléctricos, no debemos olvidar sus increíbles -para aquellos tiempos- capacidades. Charles Jeanteud superó en 1898 la velocidad de 63 km/h en un vehículo construido por él mismo y alimentado con electicidad. Sólo un año después, un coche eléctrico llamado La Jamais Contente alcanzó velocidades superiores a los 100 km/h.

Coches eléctricos: el presente y el futuro de la automoción

Volvamos a la actualidad. La creciente concienciación medioambiental y el constante desarrollo tecnológico han hecho que pronto ya no sea posible comprar coches con motor de combustión en los concesionarios. Las grandes empresas automovilísticas están abandonando la venta de coches de gasolina y están orientando su producción hacia los coches impulsados total o parcialmente por baterías. También conviene saber que, por decisión del Parlamento Europeo, a partir de 2035 los concesionarios del Viejo Continente no podrán vender coches con motor de combustión.

El principal objetivo de la introducción de los coches eléctricos en el uso cotidiano es reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. Esto se conseguirá mediante el uso de accionamientos eléctricos alternativos en el transporte público. Gracias a ello, podemos sustituir el combustible tradicional por biocombustible, GLP o GNC. De momento, los coches eléctricos más comunes son los híbridos. Sin embargo, poco a poco esta solución se irá sustituyendo por coches alimentados al 100% por electricidad.

¿Sabes en qué se diferencian los coches eléctricos?

Las marcas de coches compiten entre sí presentando cada vez más coches inteligentes propulsados por electricidad. Las mejoras no sólo afectan al confort de conducción, sino también a la autonomía de un determinado modelo. Además, hay diferentes tipos de coches eléctricos a la venta.

Coches eléctricos: tipos de conducción

Podemos distinguir 4 grupos de coches eléctricos, por el accionamiento que se utiliza en ellos. Estos son: 

  • BEV, o Battery Electric Vehicle. Este tipo de coches propulsados por electricidad no tienen motor de combustión en absoluto. Su única unidad de potencia es una batería. Se cargan desde una toma de corriente. Dependiendo de la marca del vehículo, un BEV puede tener distintas autonomías. Todo depende de la capacidad de la batería. Cabe mencionar aquí que este tipo de e-car es completamente neutro para el medio ambiente y no emite gases de escape. 
  • HEV, o Hybrid Electric Vehicle. Es un "híbrido" muy popular y conocido. Tiene tanto un motor de combustión como un accionamiento eléctrico. Este tipo de coche eléctrico se distingue por el hecho de que no es posible recargar las baterías con fuentes de energía externas. Entre otras cosas, la batería se recarga durante el frenado y otras maniobras. 
  • PHEV son las siglas de Plug-in Hybrid Electric Vehicle. Un PHEV es un coche eléctrico híbrido que tiene la capacidad de recargarse con una fuente de energía externa. Puede repostar en una estación convencional y recargarse en estaciones eléctricas especiales. Durante la conducción, el conductor puede cambiar libremente del motor eléctrico al de combustión y viceversa. Por ello, este tipo de coche eléctrico puede tener una gran autonomía de hasta 1.000 kilómetros. 
  • REEV, o Range Extended Electric Vehicle. Este tipo de vehículo utiliza un motor eléctrico como unidad de potencia principal. Sin embargo, al igual que el PHEV, el coche está equipado con un motor de combustión interna que se enciende cuando es necesario para generar la energía necesaria para mantener el funcionamiento de la batería. Se trata de una opción excelente para quienes conducen distancias cortas. La autonomía de este tipo de coche eléctrico es de unos 300 a 500 kilómetros. 

¿Cómo se carga un coche eléctrico?

La idea de cargar regularmente un vehículo con batería es algo que quita el sueño a muchos usuarios. Las preocupaciones son diversas. Desde los aspectos técnicos, la elección del conector, el cable o el adaptador hasta el tiempo y los costes de dicho proceso. Sin embargo, como dice el viejo refrán, "el diablo no es tan terrible como lo pintan". Compruebe cómo cargar con seguridad su automóvil eléctrico.

Cada usuario de e-car puede cargar su vehículo de 3 maneras.

  1. Existen las llamadas estaciones de carga rápida (DC), que utilizan corriente continua. Muy a menudo podemos encontrarlas en las estaciones de servicio tradicionales. Y lo que es más importante, su número crece constantemente, por lo que su uso es cada vez más cómodo. Una ventaja incuestionable de esta solución es el tiempo de carga. Dependiendo del modelo de coche y de la capacidad de la batería, un coche puede cargarse completamente en aproximadamente una hora. 

    Carga desde el enchufe de casa con corriente alterna utilizando el cargador EVSE. No hay el menor problema en conectar un coche eléctrico a un enchufe en casa. No es la solución más eficiente, pero permite una carga óptima del vehículo. Por desgracia, las personas que viven en bloques de pisos pueden tener bastantes problemas con esto. Además, se necesita mucho tiempo para cargar la batería al 100%. En el caso de los coches grandes, la carga puede durar más de 24 horas. 

    Wallbox es, de hecho, una estación de carga privada, que cualquiera puede colgar en la pared de su casa. Por supuesto, el edificio debe cumplir ciertos parámetros para garantizar un consumo de energía adecuado. El coche estará listo para circular tras unas pocas horas de carga.

El cable adecuado para cargar un coche eléctrico

Al comprar un coche eléctrico, el fabricante suele darnos un cable y un cargador en el paquete. Sin embargo, muy a menudo se trata de un cargador con baja alimentación de una toma de corriente Schuko. El uso de este tipo de cable con EVSE aumenta considerablemente el tiempo de carga del vehículo. Por otro lado, los cargadores de máxima potencia están disponibles en el fabricante por un precio adicional. En este caso, es conveniente comprobar las especificaciones del vehículo. Conocer los requisitos exactos de potencia facilitará la compra del cable o cargador adecuado para su coche eléctrico.

Cable de carga para vehículos eléctricos: ¿en qué debo fijarme?

¿Cuándo se utilizan los cables de carga? Cuando la estación de carga del coche eléctrico, no tiene un cable de alimentación incorporado. En este caso, es necesario tener nuestro propio cable, que conectamos a la toma de carga en el poste. Lo primero y básico a la hora de elegir un cable es su tipo. Entre los más populares se encuentran los llamados Tipo 1 y Tipo 2. En realidad, se trata de cables que terminan en enchufes especiales. El tipo de enchufe debe elegirse en función de la forma de la entrada de carga del coche. En Europa, el Tipo 2 es el más utilizado, mientras que el Tipo 1 se encuentra en los coches alimentados por electricidad en Asia o Estados Unidos. 

Otra cuestión importante a la hora de elegir un cable para cargar un coche eléctrico es su potencia. La elección de la potencia se basa en la potencia máxima del cargador de a bordo del coche. La longitud del cable también es importante. A veces un coche puede estar aparcado en un lugar de difícil acceso y entonces un cable de 2 o 3 metros de longitud puede resultar demasiado corto para cargar las baterías sin problemas. El cable de carga de un coche eléctrico debe estar fabricado con componentes de la mejor calidad. En el caso de los coches eléctricos, el cable de carga es uno de los accesorios más utilizados, por lo que conviene leer las opiniones de otros usuarios o pedir ayuda a un asesor en la tienda antes de comprarlo.

Adaptador de carga para el coche eléctrico: ¿cuándo lo utilizamos?

Dado que existen diferentes tipos de terminaciones de cable para cargar coches eléctricos, puede darse la situación de que la estación de carga tenga un enchufe diferente al del cable que tenemos. Esta es la diferencia fundamental entre un cable y un adaptador. Utilizamos adaptadores cuando una estación de recarga de vehículos eléctricos tiene un cable, pero de un estándar diferente al que necesitamos. Esto ocurre especialmente si tienes un coche de generación antigua o uno importado del extranjero. En ese caso, cargar el coche se convierte en algo imposible, a no ser que utilices un adaptador especial Tipo 2 / Tipo 1. Con este accesorio puedes cambiar fácilmente de un enchufe Tipo 2 en el cable que viene de la estación de carga a un Tipo 1 en tu coche. Además, el dispositivo es muy robusto y relativamente pequeño, por lo que ocupa muy poco espacio en el maletero. Merece la pena llevarlo siempre encima, sobre todo cuando se viaja al extranjero. Así evitarás sorpresas desagradables y paradas imprevistas.

¿Cuánto cuesta cargar un coche eléctrico?

Esta es una de las preguntas más importantes que se hace la gente que está pensando en comprar un vehículo eléctrico. Por desgracia, no hay una respuesta clara. Todo depende del precio de la electricidad y de la forma en que se utilice la energía durante la conducción de un modelo de coche concreto.

La solución más cara es cargar el coche en estaciones de carga rápida. El precio por 1 kWh depende de la lista de precios actual del operador. Para animar a los propietarios de coches eléctricos a utilizar dichas estaciones con más frecuencia, los operadores suelen ofrecer la compra de varios tipos de abonos, que en última instancia reducen el coste de la carga del coche. Los precios aplicables pueden consultarse fácilmente en Internet.

También puedes cargar tu coche conectándolo a un enchufe en casa. En este caso, el coste dependerá de la tarifa del proveedor de electricidad. Para reducir los costes, merece la pena ponerse en contacto con la compañía que le suministra la electricidad o considerar la posibilidad de instalar una instalación fotovoltaica.